- Políticos, a escuchar más y hablar menos

En concreto… (Publicada el 06 de septiembre)

Por: Joaquín Peregrino Gómez

Twitter: @joaquinpegoz

La crisis interna de los partidos políticos se debe más que nada a la deficiente capacitación de sus cuadros, se preocupan más por los procedimientos y se olvidan de los resultados. Si la finalidad de los partidos políticos es abrirse a la sociedad para representarla a través de sus militantes en las distintas esferas del gobierno, lo que debería preocuparles, son los resultados que se reflejen en un mejor nivel de vida de los ciudadanos, en una buena imagen del partido  y no en los procedimientos en los que solo un  grupo selectos de actores se adueñan del poder, amasando inmensas fortunas. Es por eso que las competencias que se inculcan van más dirigidas a los procedimientos para acceder al poder y al ejercicio de gobierno, que a las competencias genéricas que les ayudarían a lograr  redes conversacionales eficientes, en las que los partidos políticos vayan creando liderazgos capacitados que humanicen la política y se acerquen los ciudadanos. El Partido Movimiento Ciudadano se caracteriza por capacitar a sus cuadros en competencias genéricas.

Una de las líneas de aprendizaje en las Competencias Directivas Genéricas, es la importancia de la escucha. El objetivo: Lograr cerrar la brecha entre el que habla y el que escucha.  En todos los dominios del lenguaje el escuchar es básico, pero mas en el dominio político, el no saber escuchar con eficiencia puede generar muchos conflictos, más a quien se apresura a emitir juicios, que a la persona que se dirigen los calificativos. Caso concreto, la entrevista de Pedro Jiménez León en Telerreportaje el lunes pasado. Jiménez león, hizo una serie de declaraciones sobre los escenarios políticos nacional y estatal; él habló claro, pero muchos actores políticos escucharon lo que querían  escuchar de acuerdo a sus intereses, a su formación y a sus motivaciones del momento. El ex diputado federal, nunca ofendió a nadie del PRD, pues jamás emitió juicios, sin embargo el dirigente estatal Roberto Romero del Valle, salió al día siguiente con la espada desenvainada, según él cortando oreja y rabo.

Categóricamente, Pedro Jiménez dijo, refiriéndose al PRD, “A mi no me gustaría que fuera el partido oficial”, es decir, a mi no me gustaría que fuera como el PRI, que tenía de rehén al gobernador. EL PRD, dijo, será “el partido en el gobierno”, lo cual lejos de ser una critica, es un elogio, pues el partido oficial es aquel que impone, que avasalla, que utiliza los recursos públicos para perpetuarse en el poder; a diferencia del partido en el gobierno, que es aquel que comparte responsabilidades, coadyuva en el desarrollo de los programas de gobierno y vigila el buen uso de los recursos públicos. También dijo “que  hay muchos que hablan de refundar al PRD”, y que esto afectaría la relación de AMLO con el PRD y dijo mas; a mi “me gustaría que el PRD y Andrés Manuel siguieran unidos”, “juntos representan una gran fuerza”. Esto el dirigente estatal del PRD, lo tomó como un consejo, cuando fue una declaración de un político de talla nacional como lo es Pedro Jiménez León.  Esto lo dijo a raíz de los acontecimientos que están a punto de desarrollarse la próxima semana en el Zócalo capitalino. Me queda claro que  no fue su intención dar consejos, no creo que sea su estilo, solo expresó un deseo para el futuro de la izquierda en México.  Por eso me parecen un exceso los calificativos de Romero del Valle, pues aparte de que no construyen, carecen de fundamento.

Si hay algo que ha caracterizado la actuación de Pedro Jiménez León, es su  congruencia, tanto cuando estuvo en el  PRI, como cuando se decidió abrazar los ideales de la  izquierda, lo cual le dan autoridad moral. En cuanto a su declaración de que el PRD, jamás ha ganado una gubernatura solo, los números están a la vista, la historia lo respalda.  Todas las gubernaturas las han ganado en alianzas o coaliciones, es cosa de revisar los triunfos en Baja California Sur, Michoacán, Zacatecas, Guerrero, Puebla y Chiapas, y es precisamente por los conflictos internos generados en el PRD, como esas entidades han regresado al poder del PRI o del PAN. En el  DF, el PRD ha superado los conflictos internos, y lleva en el poder más de 18 años y va por su cuarto periodo con Miguel Mancera; esto, primero por las reformas progresistas,  el buen gobierno y el liderazgo de Cuauhtémoc Cárdenas, López Obrador y Marcelo Ebrad.  

Por otra parte, no puede llamarse oportunista a alguien que lleva mas de doce años luchando del lado de la izquierda progresista y  quien prefirió dar paso a otros políticos al senado, aun cuando no aceptaron medirse con él en las encuestas. Por cierto, ¿Tendrán calidad moral quienes con las siglas del PRD, trabajaron en contra de AMLO y de Arturo Núñez? ¿A poco no son oportunistas los que haciendo labor de zapa en la penumbra, hoy se dicen defensores del triunfo de Arturo Núñez? y  ¿Será cierto que desde la dirigencia del partido amarillos se les instruyó para que trabajaran en contra de AMLO y Núñez?, bueno eso dijo José M. García Tiquet,  uno de los acusados de traidores. Digo, son preguntas. Pues estamos hablando de calidad moral y de oportunismo político.

  CONCRETÍSIMO

…DICE EL DIPUTADO,  Peralta Focil, que si la agenda particular les permite, irán a los recorridos para supervisar las obras que fueron seleccionadas por el OSF que preside Rullan Silva, para luego  proceder a la calificación de las cuentas publicas. ¿Qué, no son prioritarias las  tareas legislativas y no los asuntos de gestoría? ¿Cual agenda es prioritaria? En fin, veremos. joaquinperegrino@hotmail.com. www.enconcreto-jpg.blogspot.com